No tenemos que vivir siendo víctimas, ni mucho menos presos de nuestros pensamientos
Porque no sólo el cuerpo se intoxica con los efectos de una vida agitada o la mala alimentación, entre otros aspectos. El estrés, la presión, y otros factores pueden afectarnos mentalmente y por ende afectar nuestra salud física.
Hoy les propongo acabar con el hábito destructivo de autosabotearnos con pensamientos tóxicos, para ello es importante tomar consciencia y reconocer los hábitos inconscientes de nuestra mente y así detectar los momentos en los cuales nos comenzamos a desviar hacia algún pensamiento tóxico y ambiente destructivo dentro de nosotros. Al darnos cuenta, podemos tomar un minuto para detenernos, respirar y simplemente dejar ir el pensamiento. Al soltarlo, podemos reemplazarlo por algún pensamiento positivo de agradecimiento sobre algo en nuestras vidas, que este yendo bien.
Les dejo con una serie de recomendaciones que pueden ayudar en este proceso:
Sólo cuando seamos capaces de dar las gracias a Dios, comenzaremos a comprender que todo, procede de Él y que no hay nada que temer.
Practicar la Meditación
La meditación es uno de los aspectos más importantes, para lograr paz y felicidad en la vida de cualquier ser humano. Una de las más importantes e impactantes razones para que practiques la meditación, tiene que ver con la fortaleza mental que te da. La fuerza de la mente es una de las herramientas más potentes con las que puedes impactar y mejorar todos los aspectos de tu vida.
Practicar la Relajación
Es posible relajar la mente, y esto es hecho de la misma manera como se relaja su cuerpo, manteniéndola quieta. Esto significa estar alerta a cualquier movimiento de pensamiento. Esto toma concentración, y la concentración es el producto de una mente relajada.
Esa atención relajada es el tipo de atención que da una sensación de ser renovado.
Lo cierto es que en lugar de vivir quejándonos por todo, deberíamos procurar sonreír más.
Cuando sonríes tu vida
funciona de mejor forma, pues mueves el universo de manera contraria a la que
lo hace el resto y obtienes lo que quieres y
necesitas sin un
mayor esfuerzo.
Sonríe más, quéjate menos,
pues si vives quejándote vivirás la
vida con menos ímpetu, con menos ganas y envejecerás más
rápido. Te sentirás menos vivo y no te atreverás a vivir las
experiencias, ni a aceptar los desafíos que se presentan. Si vives quejándote
de todo lo negativo que pasa, seguirá sucediendo, pues te mostrarás abierto a recibir las energías negativas.
Prefiere sonreír, siempre,
pues sonreír es de almas grandes.
Sonreír, cuando el corazón llora, demuestra la fortaleza que puedes tener y demuestra que nada ni nadie nunca será capaz de doblegarte, pase lo que
pase.
Practicar la Ley del dar y Recibir
Practicar la Ley del dar y Recibir
“Todo lo que no se da se pierde” nos dice la Madre Teresa de Calcuta.
Recibir es lo mismo que dar, porque dar y recibir son aspectos diferentes del flujo de la energía en el universo. Y si detenemos el flujo desde alguno de los dos polos, obstaculizamos la inteligencia de la naturaleza.
Debemos dar y recibir para mantener circulando permanentemente la riqueza y la afluencia o cualquier cosa que deseemos en la vida.Al dar y al recibir, lo más importante es la intención. La intención debe ser siempre crear felicidad para quien da y para quien recibe, porque la felicidad sostiene y sustenta la vida y, por lo tanto, genera bienestar.
Ejercitarse Diariamente
Cuando una persona se ejercita, se ve y se siente bien consigo misma, no solo a nivel físico, sino que a nivel mental también se favorece.
Crear este hábito te ayuda a dormir mejor y lograr un sueño más profundo, el cual que te permite tener mejor concentración en el día , aumentar tu productividad, reducir los niveles de estés y mejorar tu estado de ánimo.
Estas son algunas sugerencias que podemos poner en práctica para desintoxicar nuestra mente y así lograr un estado de bienestar integral en nuestra vida.
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