Cuando nos preguntamos ¿Qué quiero? ¿Qué es eso que en verdad quiero en mi vida? ¿Qué anhela mi corazón? La respuesta que muchos de nosotros escuchamos es amor o cualquiera de sus parientes cercanos: conexión, aceptación, comprensión, aprecio, intimidad, y calidez.
Tal vez pensemos que nos falta amor en nuestras vidas, o que no tenemos suficiente, pero en realidad, el amor es nuestra naturaleza esencial. No viene de afuera y por lo tanto no lo podemos perder ni nos lo pueden arrebatar. Cuando sentimos que nos falta amor es porque hemos olvidado quiénes somos en realidad.
Puedes comenzar a experimentar el amor desde el fondo de tu ser al ser amable y atento contigo mismo, observando cuando tu diálogo interno sea severo o crítico y dándote paciencia y compasión. Puede resultarte útil usar afirmaciones como Me amo y me acepto, tal como soy.
Hoy, sabe que eres amor puro y que eres digno de amor infinito.
“Cuando comienzas a tocarte el corazón o dejar que tu corazón sea tocado, comienzas a descubrir que no tiene fondo, que no tiene ninguna resolución, que este corazón es enorme, vasto, y no tiene límites. Comienzas a descubrir cuánta calidez y gentileza está ahí, además de cuánto espacio”. Pema Chodron
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